En todo un misterio se ha convertido la muerte del pastor Ernesto Morales de 51 años de edad, hecho ocurrido en el sector de Paso Canoas arriba, en la provincia de Chiriqui, área fronteriza entre Panama y Costa Rica, cuando lo que inicialmente parecía un accidente producto de una explosión de una computadora, dio como resultado un homicidio con arma de fuego, donde hasta ahora no existe captura por este hecho.
Han transcurrido más de tres meses de haberse registrado el homicidio y no hay personas detenidas que enfrenten las autoridades por la muerte de esta persona donde incluso fuentes cercanas al hecho aseguraban que existían personas muy allegadas al pastor responsables de su muerte, información que hasta ahora no ha sido corroborada por las autoridades del Ministerio Público quienes guardan silencio en cuanto a este hecho.
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Familiares del pastor esperan que se les haga justicia por la muerte de esta persona, solicitan al Ministerio Público agilidad para dar con los responsables de este homicidio y que no escapen de la justicia.
Una fuente cercana a la información manifiestó que la esposa del pastor, quien en todo momento manifiestó que la muerte de su esposo se debió a quemaduras producto de la explosión de una computadora, ha sido indagada por las autoridades para conocer más sobre el homicidio de su esposo.
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En la residencia del pastor se han realizado múltilples diligencias para esclarecer el hecho de sangre que le costó la vida a un miembro de la iglesia evangélica en el distrito de Barú,
El hoy occiso dejó en la orfandad a dos menores de edad (femeninas) y no se descarta que se trate de un crimen con ribetes pasionales; sin embargo hasta ahora las investigaciones continúan.
